La líder opositora venezolana y Premio Nobel de la Paz 2025, María Corina Machado, y el presidente electo de Venezuela, Edmundo González Urrutia, respaldaron el informe presentado por el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, que advierte sobre un incremento sostenido de la represión estatal y graves violaciones de derechos fundamentales bajo el régimen de Nicolás Maduro.
El informe, presentado ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU en Ginebra, documenta detenciones arbitrarias, desapariciones forzadas, torturas, muertes bajo custodia y restricciones severas al espacio cívico, así como el uso de leyes antiterroristas para perseguir a opositores, periodistas, defensores de derechos humanos y organizaciones civiles.
En un mensaje difundido en la red social X, Machado afirmó que el Alto Comisionado “habló con crudeza y expuso ante el mundo la magnitud de la barbarie que ocurre en Venezuela”. Señaló que el documento confirma denuncias reiteradas sobre incomunicación prolongada, torturas físicas y psicológicas, y condiciones carcelarias que ponen en riesgo la vida de los detenidos.
La dirigente opositora alertó además sobre el uso del secuestro de familiares como método de persecución política, así como la promoción de mecanismos de delación entre ciudadanos para quebrar la confianza social e instaurar el miedo como forma de control. “El régimen ha institucionalizado el terror”, sostuvo.
Por su parte, González Urrutia advirtió que las violaciones documentadas por la ONU “no son hechos aislados ni excesos circunstanciales”, sino prácticas sistemáticas destinadas a disciplinar a la sociedad. Denunció que cientos de familias desconocen el paradero o las condiciones de salud de sus seres queridos, y que esa incertidumbre forma parte deliberada del esquema represivo.
El informe de la ONU señala que centros de detención como El Helicoide, Rodeo I y Fuerte Guaicaipuro continúan siendo escenarios de tortura y tratos crueles, inhumanos y degradantes. También denuncia alistamiento forzoso, incluso de adolescentes y personas mayores, en la Milicia Bolivariana, así como el uso de plataformas digitales estatales para fomentar la vigilancia y la autocensura entre vecinos.
Volker Türk reclamó la liberación inmediata de todas las personas detenidas arbitrariamente, el cese de la persecución a familiares de opositores y la garantía de condiciones mínimas de dignidad para quienes permanecen privados de libertad. “El sufrimiento del pueblo venezolano debe terminar”, afirmó.
Machado y González Urrutia coincidieron en señalar que la comunidad internacional no puede limitarse a registrar los abusos, sino que debe exigir mecanismos de seguimiento, cooperación efectiva y rendición de cuentas, ante lo que califican como un patrón persistente de violaciones graves a los derechos humanos.
Ambos dirigentes sostienen que solo una acción internacional decidida y sostenida permitirá frenar el deterioro institucional y el clima de miedo que, según la ONU, define hoy la vida bajo el régimen de Nicolás Maduro.
Fuente: Infobae