El entorno de la líder opositora destaca que el premio reconoce la valentía colectiva de los venezolanos frente a la represión chavista. La entrega del galardón en Oslo sigue en duda por los riesgos para su seguridad.
El equipo de María Corina Machado, líder opositora venezolana y Premio Nobel de la Paz 2025, aseguró que el galardón que le será entregado el próximo 10 de diciembre constituye un “tributo al pueblo entero que resistió con valentía” frente al régimen de Nicolás Maduro. El mensaje fue difundido a través de redes sociales en vísperas de la ceremonia en Oslo, a la que Machado espera asistir si las condiciones de seguridad lo permiten.
Según su equipo, el Nobel refleja la lucha colectiva de los venezolanos que han soportado años de represión, persecución y exilio.
“Por las madres que esperan, por los hijos que faltan, por los presos que miran el sol entre barrotes, por los que partieron dejando promesas, por los que luchan sin descanso”, expresó el entorno de Machado. “Cuando pronuncien su nombre en Oslo, sabremos que el Nobel será un tributo a un pueblo entero que resistió con valentía”.
La incierta asistencia de Machado a Oslo
El Comité Nobel Noruego confirmó que Machado está invitada a la tradicional rueda de prensa del 9 de diciembre y a la ceremonia de entrega del premio el día 10. Sin embargo, su presencia depende de que pueda abandonar Venezuela sin riesgo de captura o represalias.
El presidente del Comité Nobel, Jørgen Watne Frydnes, advirtió que el viaje es altamente peligroso:
“El régimen de Venezuela ha dicho que quiere quitársela de en medio”.
Machado, que permanece en la clandestinidad desde hace meses, afirmó a medios noruegos que solo viajará si existe un cambio político que garantice su regreso seguro. Mientras tanto, continúa denunciando persecución directa por parte del Estado venezolano.
Respaldo internacional: Daniel Noboa acompañará a Machado en Oslo
El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, confirmó públicamente que asistirá a la ceremonia del Nobel a invitación personal de Machado. Desde sus redes sociales, destacó que el premio no solo reconoce a la dirigente opositora, sino a “toda una región que se niega a rendirse”.
Noboa calificó como un honor acompañarla en Oslo y reiteró su compromiso con la defensa de la democracia en América Latina.
Un Nobel en medio de represión y crisis humanitaria
El reconocimiento llega en un momento de máxima presión contra la disidencia en Venezuela. La líder opositora ha denunciado que la dictadura de Maduro utiliza la pobreza como herramienta de control social, mantiene presos políticos en condiciones inhumanas y ha generado un éxodo de millones de venezolanos.
En un mensaje grabado para el Foro Sobre el Futuro de la UE en Madrid, Machado pidió a Europa apoyar la “reconstrucción moral” del país y recordó que la democracia “no es un lujo ni un concepto pasado, es una conquista diaria”.
También sostuvo que Venezuela será libre y que su lucha busca que los jóvenes venezolanos puedan construir su futuro en su propio país.
Un premio que trasciende fronteras
El Equipo Nobel destacó que la labor de Machado ha sido reconocida por su defensa de los derechos democráticos, el liderazgo en la lucha pacífica contra el autoritarismo y su papel como símbolo de resistencia cívica.
Mientras continúa la persecución contra opositores en Venezuela —incluyendo sentencias de 30 años de cárcel por manifestaciones o simples publicaciones en redes—, la figura de Machado emerge como catalizadora del apoyo internacional y como rostro visible de la demanda de libertad y justicia.