Venezuela vive horas de máxima tensión a raíz de la inminente juramentación de Nicolás Maduro, quien prevé asumir este viernes 10 de enero un tercer mandato consecutivo, pese a que la oposición y varios gobiernos internacionales desconocen su victoria y reconocen a Edmundo González Urrutia como presidente electo en los comicios del pasado 28 de julio. A continuación, se exponen los principales hechos y actores involucrados en este nuevo episodio de crisis para entender qué pasa en Venezuela.
1. Las elecciones cuestionadas y la pugna por la presidencia
Según el Consejo Nacional Electoral (CNE), controlado por el oficialismo, Maduro ganó en julio con el 52% de los votos. Sin embargo, el organismo no ha presentado hasta el momento los resultados detallados ni las actas de escrutinio que certifiquen su proclamada victoria.
Por el contrario, la oposición asegura que Edmundo González Urrutia, un diplomático que fue su candidato único, obtuvo casi el 70% de los sufragios. Para justificarlo, ha publicado un conjunto de actas electorales cuya autenticidad fue avalada por el Centro Carter y respaldada por la Organización de Estados Americanos (OEA). González Urrutia salió de Venezuela a comienzos de septiembre de 2024, tras recibir amenazas de arresto, y se instaló en España. Pese a ello, ha prometido volver a Venezuela y juramentarse como jefe de Estado el mismo día de la investidura de Maduro.
A lo largo de estos meses, Estados Unidos, Canadá, varios países de la Unión Europea y un bloque de naciones latinoamericanas han expresado su respaldo a González Urrutia y su desconocimiento de los resultados oficiales proclamados por el CNE. Por su parte, Rusia, China e Irán —así como otros gobiernos aliados al chavismo— reconocen a Maduro e incluso enviarán delegaciones a su acto de toma de posesión.
2. La escalada represiva y la detención de opositores
En los días previos al 10 de enero, la capital venezolana y otras ciudades han sido fuertemente militarizadas. Organismos de inteligencia como el Sebin y la DGCIM (Dirección General de Contrainteligencia Militar) han incrementado sus operativos, revisando vehículos y desplegando retenes en los accesos a Caracas.
La situación se tensó aún más con el arresto de varios opositores y activistas:
- Rafael Tudares, yerno de Edmundo González, fue detenido cuando llevaba a sus hijos al colegio.
- El excandidato presidencial Enrique Márquez, que tras los comicios también desconoció la victoria de Maduro, fue acusado de “conspiración” y permanece bajo custodia.
- El reconocido defensor de derechos humanos Carlos Correa, director de la ONG Espacio Público, fue detenido por agentes de inteligencia, sin que se conozca su paradero.
- En el interior del país, al menos una decena de dirigentes vecinales y activistas han corrido la misma suerte, según denuncian tanto partidos de la oposición como organizaciones como Foro Penal y Observatorio Venezolano de Conflictividad Social (OVCS).
El Gobierno venezolano insiste en que ha capturado “mercenarios extranjeros” y “conspiradores” financiados, supuestamente, por Estados Unidos. Organismos como la Misión Internacional Independiente de Determinación de Hechos para Venezuela de Naciones Unidas vienen señalando desde hace varios años que los cuerpos de seguridad venezolanos incurren en prácticas de detenciones arbitrarias, torturas y desapariciones forzadas, sin que hasta la fecha se hayan producido cambios sustanciales.
3. La reaparición de María Corina Machado y su breve detención
La figura de María Corina Machado volvió al primer plano tras su aparición pública en las protestas convocadas para este jueves 9 de enero, que marcaron su regreso a la calle luego de permanecer en la clandestinidad desde finales de agosto. Machado está acusada por el Gobierno de “traición a la patria” y no se le permitió competir en la contienda electoral de julio.
En una movilización multitudinaria en Caracas, Machado aseguró que el 10 de enero representaría un punto de quiebre en la política venezolana y exhortó a “vencer el miedo” frente a las fuerzas de seguridad y la represión. Pocas horas después de su discurso, su equipo denunció que fue “interceptada violentamente” por agentes del Estado.
#Atención ‼️
— Comando ConVzla (@ConVzlaComando) January 9, 2025
Hoy, #9Ene, saliendo de la concentración en Chacao, Caracas, María Corina Machado (@MariaCorinaYA) fue interceptada y tumbada de la moto en la que se trasladaba. En el suceso detonaron armas de fuego. Se la llevaron retenida por la fuerza. Durante el periodo de su…
Aunque su retención duró cerca de una hora, en ese lapso su paradero fue desconocido. Finalmente, y luego de la presión ejercida por dirigentes opositores y la comunidad internacional —incluidos pronunciamientos del presidente electo de EE.UU., Donald Trump—, Machado fue liberada. El Gobierno de Maduro calificó los reportes de su secuestro como una “operación psicológica” y aseguró que la dirigente busca “provocar la violencia en el país”.
¡Gracias, Presidente electo, Trump! Los venezolanos sabemos que contamos con su determinación sobre la causa venezolana. https://t.co/mSHeK9td4X
— Edmundo González (@EdmundoGU) January 9, 2025
Machado agradeció a sus seguidores y denunció que las fuerzas de seguridad dispararon contra la motocicleta en la que se desplazaba. En sus primeras declaraciones tras la liberación, reafirmó su compromiso con la protesta y su respaldo a la toma de posesión de González Urrutia, asegurando que “esto no ha terminado”.
4. Protestas y choque de fuerzas en las calles
En simultáneo, sectores oficialistas organizaron contramarchas a favor de Maduro en las mismas zonas donde se habían citado los opositores, mientras el Ejecutivo movilizaba a la Milicia Bolivariana y a grupos de civiles armados (los llamados “colectivos”) para custodiar puntos estratégicos.
Las protestas opositoras se extendieron por todo el país. Algunas fueron disueltas con gases lacrimógenos y detenciones, aunque en determinadas regiones los manifestantes lograron mantener su presencia en las calles. Organizaciones como Foro Penal contabilizan más de 2.000 detenciones desde la noche electoral de julio, en una ofensiva gubernamental que se ha intensificado estas últimas semanas.
5. Expectativa internacional y la “doble investidura”
Maduro anunció que se juramentará este viernes 10 de enero ante la Asamblea Nacional. Sin embargo, gran parte de la comunidad internacional no reconoce su triunfo. Varios países —entre ellos Estados Unidos, Canadá, Ecuador, Paraguay y Colombia— han declarado abiertamente que no enviarán representantes al acto y que, por el contrario, consideran a Edmundo González Urrutia como el legítimo vencedor.
El propio González anunció que regresará a Venezuela para ceñirse la banda presidencial, amparado en el respaldo diplomático obtenido durante su reciente gira por Argentina, EE.UU., Panamá y República Dominicana. Allí, varios exmandatarios de la región le habrían prometido acompañarlo en una hipotética posesión. Sin embargo, el Gobierno venezolano lo ha amenazado con arrestarlo en cuanto pise territorio nacional, alertando que lo considera un “invasor” e incluso ofreciendo una recompensa de 100.000 dólares por su captura.
¡Los venezolanos no tienen miedo! Me llenó de orgullo y emoción ver las calles llenas de hombres y mujeres valientes, exigiendo sus derechos.
— Edmundo González (@EdmundoGU) January 10, 2025
Por todos ellos y por la comunidad internacional que mostró su apoyo firme y contundente.
María Corina fue liberada. Entendieron la… https://t.co/1iScqdWijM
En este clima de tensión, se baraja la posibilidad de que González Urrutia lleve a cabo una “investidura simbólica” en alguna embajada u otro espacio diplomático que no esté bajo control del Gobierno de Maduro, o bien que intente ingresar al país para forzar un quiebre en el chavismo.
6. 10 de enero: qué pasa en venezuela
La jornada del 10 de enero promete ser un punto de inflexión en la crisis política, social y económica que atraviesa Venezuela desde hace años. Mientras Nicolás Maduro insiste en tomar posesión para un tercer mandato sin presentar las actas de escrutinio, Edmundo González Urrutia asegura que tiene en sus manos la prueba de que fue el verdadero ganador de las elecciones y que regresará para jurar el cargo.
Organismos internacionales, gobiernos extranjeros y organizaciones de derechos humanos miran con preocupación este nuevo choque de fuerzas en el país, marcado por un creciente despliegue militar y un operativo represivo que ha dejado tras de sí decenas de detenciones y denuncias de torturas. La oposición, encabezada por figuras como María Corina Machado, llama a mantenerse en las calles hasta que el oficialismo reconozca “la verdadera voluntad del pueblo” expresada en los comicios de julio.
El desenlace sigue siendo incierto. Lo único claro es que Venezuela se encamina a uno de los momentos más álgidos de su crisis política reciente, con la comunidad internacional pendiente de cualquier desenlace que determine si, finalmente, habrá un cambio en la conducción del poder o si Maduro consumará su cuestionado tercer sexenio como presidente.